martes, 9 de febrero de 2010

La cara de la sangre

Una cara lejos del tiempo.
Una cara lejos, tan lejos.
Una cara se hunde en un cuerpo.
Una cara sin verse al espejo.

Lejos, pasaban las horas.
Lejos, en parte tan cerca: en la sangre.

¿Desde dónde miran los ojos de este destino?
¿Desde cuándo el silencio es tu capricho?

Ya no grito por tus brazos, ya no.

1 comentario:

Gonzinko dijo...

Cara o seca?? Siempre el mismo dilema