jueves, 13 de octubre de 2011

El show de los necios

El drama: el arma de los muertos vivos.
Terremotos filosos, brillantes hogueras, tornados siniestros? ¡NO!
Es el drama, el arma fulera de los desesperados.
¡El drama! Lo que hace girar su mundo, armarlo y dominarlo

¡Bienvenidos todos los débiles de opinión y los frágiles de motivos!
¡Bienvenidos sean sus victimas a este, el buen teatro de los necios!

La función está por comenzar



Romeo afilaba sus cuchillos a la luz de las velas, pensaba: "ya cazaré a mi Julieta"
El que no busca no encuentra, siguiendo las pistas, armando las tretas, iba perdiendo su camino hacia un horizonte de tragedias.
Pero...¿Quién se ha equivocado? ¿el que quiere lo prohibido o el que lo ha pronunciado como un pecado?
Ayer decía sus oraciones con lujuria, ese Romeo de pocas excusas, sabanas rotas, difusas...

Su Julieta estaba en penitencia, porque había gritado el conjuro por error, "no te amo" le dijo, y asi, con palabras, lo masacró. Eran las siete cuando la dama soñó al caballero, eran las siete en el mundo entero, porque no existiría el mundo donde no existan ellos.

¿Quién ha sido el autor del drama? ¿los amantes del verso o los que prohibieron su alborada?

Fue entonces, en el seno de la trampa, donde el ansuelo perdió el destino y picó su suerte la carnada.

Es que no han sido las mil Julietas, ni los mil Romeos, ni todos sus Lorenzos, los que han hecho del drama, el arte de los necios.

Tal vez no sea pecado, si con uñas y dientes, puedo decirles:
De eso, mis amigos, se trata el cielo, un minuto con nuestro Romeo, una estrella con nuestra Julieta. Un destello de amor hecho y deshecho en el eterno drama, de este NECIO planeta.

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